Homenaje a los maestros argentinos del Arte Geométrico


Organizada por la Fundación Rosalía Soneira en el marco del IV Congreso Iberoamericano de Cabri, que se desarrolló el 23 y el 26 de Septiembrede 2008, la exposición de pintura y escultura denominada "La Geometría en el Arte" se presentó en el Museo de Bellas Artes Emilio A. Caraffa.

La muestra pretende dar cuenta de un período del arte argentino y rendir un merecido homenaje a los maestros argentinos del arte geométrico, muchos de ellos pertenecientes al movimiento Madí Internacional, y aquellos que en su momento fueron censurados por apostar a una expresión de vanguardia, como fue el caso del artista cordobés Ernesto Soneira.

No es desacertado afirmar que esta muestra se convertirá en la apuesta cultural más significativa que se haya realizado en Córdoba durante 2008 y en su concreción participan no sólo la Fundación Rosalía Soneira, la FAMAF y el Museo Provincial de Bellas Artes Emilio Caraffa, sino diversas instituciones de todo el país, tales como el Museo de la Universidad Nacional de Tucumán, Museo de Arte Contemporáneo de Salta, el Centro Cultural España Córdoba, la Escuela Superior de Bellas Artes Dr. Figueroa Alcorta, el Museo de Arte Construido de Buenos Aires, el Museo de Arte Contemporáneo Latinoamericano de La Plata MACLA, Fundación del Interior de Mendoza, la Galería ED Contemporáneo de Mendoza, el Museo de Bellas Artes Dr. Genaro Pérez de Córdoba y el Centro de Arte Contemporáneo Chateau CAC de Córdoba, entre otras.

En el marco del IV Congreso Iberoamericano de Cabri que se desarrollará en la capital de la provincia se abordarán los últimos avances de la Geometría Interactiva en el campo de las matemáticas (análisis, geometría, estadística, modelación de fenómenos físicos y naturales), el arte y la cultura.

Cabe destacar que el Museo Provincial de Bellas Artes Emilio Caraffa fue recientemente remodelado e integrado a la "media legua de oro" junto al Teatro Real, el Paseo del Buen Pastor, el Palacio Ferreyra, la Casa Dionisi y el Museo de Ciencias Naturales. El Caraffa está pensado como un espacio donde el público dialogue con el arte y participe activamente en la construcción del sentido de la obra artística. En esta perspectiva, y como laboratorio de arte contemporáneo, es un lugar más que apropiado para cobijar a la mayor muestra de arte geométrico en la historia de Córdoba. Con diecisiete artistas vinculados al movimiento Madí, la exposición pretende construir un relato que colabore en la comprensión sencilla y profunda de los diversos procesos creativos que encuentran su origen en el entrecruzamiento entre arte y geometría.

La creación del movimiento Madí a mediados de la década del 40 en Buenos Aires marcó un punto de inflexión en la emergencia de las "vanguardias" del Siglo XX. Sus protagonistas plasmaron en un manifiesto el sentido, el alcance en perspectiva y el carácter humanístico de la aplicación de la geometría a la creación. Fue el primer movimiento cultural, proyectado internacionalmente desde Argentina, que incluyó una propuesta interdisciplinaria para las distintas expresiones artísticas (dibujo, pintura, escultura, arquitectura, música, poesía, teatro, novela, cuento y danza) y marcó el paso del arte moderno al contemporáneo.

El Manifiesto Madí fue la semilla, luego se sumaron otros conceptos que colaboraron en la resignificación del objeto tratado en alternativas diversas (Arte Concreto, Perceptismo, etc). No obstante, el debate continúa, las teorías y fundamentos de aquellos intelectuales del arte siguen siendo hoy motivo de respeto y valoración. Nombres como Carmelo Arden Quin, Bolívar Gaudín, Raúl Lozza, Martín Blaszko componen la primera línea de los maestros precursores. Luego, María Martorell, Norberto Cresta y el cordobés Ernesto Soneira se sumaron a la encomiable tarea de seguir profundizando sobre otras variantes de la geometría en el arte.

Los artistas están representados a través de sus pinturas y esculturas en esta muestra, que tiene como propósito fundamental, mas allá del placer estético, poner a disposición del público un instrumento de reconocimiento y valoración de una parte significativa de la historia del arte en Argentina.

Las líneas teóricas, los contextos sociales, culturales y políticos que confluyeron en el surgimiento de esta corriente filosófica y estética, así como una alineada cronología que incluye desde sus fundadores hasta los referentes actuales y las derivaciones de esta corriente del arte abstracto construirán un relato artístico accesible a cualquier público. Y ésa es la meta que persigue el Museo Caraffa. Tal como lo expresa su Director: "El museo es un objeto arquitectónico poroso, que interactúa con su entorno. Construido con muros de hormigón y grandes vidrios al exterior, el Caraffa quiere ser un espacio donde el arte se sienta cómodamente contenido y ayude a borrar las fronteras entre lo privado y lo público, entre el ocio y el trabajo, en definitiva, entre el arte y la vida".

Las primeras presentaciones en Córdoba fueron polémicas, presentándose anécdotas que en momento, causaron un revuelo sin precedentes, como la que sobrevino a la causa de la clausura de la muestra que Ernesto brindara en el Salón Blanco del Ministerio de Obras Publicas por orden de un alto funcionario que considero un cuadro donde se podían observar bañistas desnudas como "Inmoral". Por ello, la muestra fue clausurada al día siguiente de su inauguración. La reacción contestataria ante este agravio al artista no se hizo esperar, Deodoro Roca y amigos, en represalias y por solidarizarse con Ernesto , vistieron con ropa interior, todas las estatuas de la ciudad de Córdoba, ridiculizando así, la acción del funcionario, quien dió marcha atrás, sobre sus ambiguos Juicios de valor.


Un merecido Homenaje

Ernesto Soneira no sólo fue un artista de vanguardia, innovador y audaz, fue también un hombre comprometido con su tiempo. Defendió fervorosamente la autonomía del arte y del artista y colaboró incansablemente en la instauración de los principios de la Escuela Nueva, resistida por las líneas más conservadores de Córdoba.

Tuvo influencia de artistas tales como Othon Friesz, Matisse y Marquet, que signaron su primer ciclo artístico, así como evidenció marcas del neoplasticismo de Mondrian y Van Doesburg. La influencia de las tendencias europeas fueron resultado de su viaje de estudios a Europa (1936-1939), después de graduarse en la Academia de Bellas Artes. La incansable búsqueda de lo universal y de lo racional, así como la concepción del quehacer artístico como un camino para indagar y conocer el mundo, concepción que equipara al arte con la labor científica, marcan ineludiblemente toda su producción.

Legitimado artística y socialmente gracias a su labor incansable como plástico y docente, pasados los cuarenta años, Ernesto Soneira comienza a exponer su nueva tendencia hacia la geometría. Hasta ese momento, sus obras, fauvistas, eran exhibidas con gran aceptación en Buenos Aires (Galería Viau, 1951) y Córdoba (Galería Delacroix, 1952). Producto de su incansable espíritu, alejado de la comodidad intelectual y del conformismo, paulatinamente toma distancia de la figuración y da inicio a una etapa en la que se perfila a sí mismo como dibujante proyectista, resaltando principalmente las estructuras arquitectónicas.

Surge en Ernesto una predisposición casi natural hacia proposiciones teórico-plásticas que eran concebidas como la exploración de significados alternativos a los planteados por la cultura oficial, tendencias provenientes de Buenos Aires, luego de la publicación de la revista Arturo, allá por el año 1944. El lugar donde, por decirlo de alguna manera, se "cocinaban" las nuevas ideas era la casa de su hermana Rosalía, quien, artista y docente, al igual que Ernesto, fue afecta al mundo de las artes y de la cultura. Su estudio-taller era, a menudo, lugar de encuentro de poetas, músicos, plásticos e intelectuales, encuentros en lo que las políticas culturales y educativas nacionales eran frecuentemente el epicentro de los ardorosos debates.

La difusión de las tendencias vanguardistas en la prensa nacional da cuenta de la primera aparición pública de Soneira como artista. Fue en 1954, con motivo de una muestra en la galeríía Delacroix, ocasión en la cual fue señalado como integrante del grupo Creación, con nombres tales como Marcelo Bonevardi, Ronaldo de Juan, Raúl Pecker, Raúl Diego Cuquejo, Pedro Pont Vergés, Mario Heredia y Roberto Viola, entre otros.

Sin duda, Ernesto Soneira fue un hombre adelantado, que supo captar y difundir las ideas vanguardistas y trasladarlas al ámbito cordobés, pese a las resistencias de los sectores más conservadores. Un artista que supo recrear y propagar nuevas tendencias, con un aporte invalorable a la cultura local y nacional.

Otro de los grandes homenajeados en esta muestra es, sin dudas, Deodoro Roca. Redactor del Manifiesto Liminar de la Reforma Universitaria de 1918, con un gran interés por el arte, así como la relación entre éste y la geometría, Deodoro Roca fue uno de los intelectuales más importantes de la esfera cultural de Córdoba. Amigo de los hermanos Rosalía y Ernesto Soneira, nació en Córdoba en 1890 y falleció en 1942. Ejerció la abogacía, el periodismo y fue activista por los derechos humanos. Hace poco, numerosos escritos fueron publicados en dos grandes tomos, que contienen, entre otros, numerosos ensayos sobre Estética como, por citar algunos ejemplos, "La emoción de la geometría" (1928), "Arte de geometría" (1930), "La pureza artística" (1931), y "Tacto, geometría y pintura" (s/d).

Los legados del Positivismo pueden "leerse" en los postulados de Deodoro Roca. La fe en la ciencia, la razón y el progreso harán que el fenómeno creativo, al igual que el proceso de percepción, sea concebido desde posiciones no tradicionales y atípicas hasta el momento. Entre los aspectos más importantes del pensamiento de Roca podemos citar el hecho de pensar al proceso creativo como un acto que emerge de la conciencia. La emoción que se desprende de lo estrictamente geométrico, la necesidad de eliminar lo superfluo y el orden oculto y matemático que se esconde en la naturaleza son enunciados que enriquecen la propuesta teórica de Deodoro Roca, lo cual supone un valioso legado en la reflexión en torno del arte.

La muestra que se llevó a cabo en Córdoba a fines de Septiembre fue, indudablemente, un espacio no sólo para el placer estético sino también para la reflexión sobre obras en las que subyace el entrecruzamiento del arte, la geometría y la trasgresión de los límites establecidos, en su momento, por los cánones de la cultura tradicional. Un espacio de vanguardia que resalta la infinita importancia que conlleva este homenaje a quienes con su talento y tenacidad supieron abrir el espectro intelectual del arte y estar a la cabeza de las nuevas tendencias del Siglo XX, derrumbando arquetipos y tabúes en el ámbito de la cultura, tanto a nivel regional, nacional e internacional.

Mgter. María Cristina Rocca
Septiembre de 2008 - Córdoba - Argentina


Seguir leyendo...